¿Te suena Silicon Valley? Desde hace décadas, es sinónimo de éxito empresarial e innovación. Un reducto en el que se ubican las multinacionales tecnológicas que nos han marcado en los últimos años, desde Google a Apple. También, ha sido el origen de esta nueva idea de espacios de trabajo, en los que la zona de descanso en la oficina es un imprescindible.

Numerosos estudios están demostrando la influencia que estos momentos de relax tienen en la creatividad y en la productividad de los trabajadores. Un descanso activo que puedes llevar tan lejos como las dimensiones de tu empresa o tus preferencias te permitan. Pero, siempre, basado en estos elementos protagonistas:

1. El mobiliario de la zona de descanso en la oficina
En los puntos de trabajo, es importante contar con sillas ergonómicas y mesas de altura regulable para garantizar una postura saludable a los trabajadores. En la zona de descanso en la oficina, lo que prima es la comodidad y versatilidad:

Sofás de oficina, para que los empleados se sienten o, incluso, puedan tumbarse.
Sillones confidente. Este tipo de sillas no son recomendables para las zonas de trabajo, ya que no son ergonómicas, pero sí muy cómodas. Además, son muy ligeras o tienen ruedas, lo que facilita que se puedan mover y crear grupos de personas que comparten conversación.
Sillas de gaming. Si en la zona de descanso en la oficina incluyes ordenadores destinados a juegos, este tipo de asientos son más que necesarios.
Estanterías, cajoneras y armarios para colocar juegos, libros u otros accesorios de entretenimiento. Salvo que los apoyes en la pared, es preferible que sean de media altura para no obstaculizar la vista.
Distintos tipos de mesas: de baja altura para la zona de sofás y redondas para sentarse a jugar o tomar algo.
2. La importancia de la decoración
En los nuevos diseños de oficinas, imperan los espacios abiertos y la concepción de las empresas como un todo integrado. Sin embargo, es interesante que la zona de descanso se diferencie visualmente del resto. Para conseguirlo, puedes valerte de pequeños detalles decorativos:

Carteles, cuadros o pizarras skin, perfectos para dejar mensajes motivadores o ideas que inspiren.
Plantas, que aporten ese toque de naturaleza y aire fresco, esencial en una zona de descanso en la oficina.
Una iluminación agradable, a la que puedes incorporar toques originales como una lámpara de sal del Himalaya, con su relajante luz anaranjada.
Alfombras que favorecen la confortabilidad.
Difusores de aromas que, además, cumplen una función de humidificar el ambiente.
3. El protagonismo del workcafé o comedor
Sin duda, no puede haber una zona de descanso en la oficina sin un apartado destinado a la comida y bebida. Si cuentas con espacio suficiente, te recomendamos que montes un pequeño comedor, para que los trabajadores puedan traerse la comida de casa. En caso de unas dimensiones muy limitadas, al menos dispón de una zona para tomar un café o un ligero aperitivo entre horas. Estos son algunos elementos que necesitas:

Pequeños electrodomésticos: microondas, nevera, tostadoras, cafeteras o hervidores de agua, permiten calentar o conservar alimentos y bebidas.
Una pequeña despensa para almacenar cafés, infusiones y snacks de oficina.
Cubiertos, vasos y platos.

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